Uno de los retos a los que el personal de un museo se enfrenta a diario es, sin duda, la protección de los fondos que custodia. En la conservación preventiva de las colecciones deben cumplirse unos criterios básicos que las resguardan de factores externos, como la suciedad, los cambios de temperatura, la humedad o de organismos, como insectos y hongos. También es necesario tener en cuenta los procesos de manipulación, transporte y exhibición de las piezas, así como la idoneidad de los materiales empleados en cajas y envoltorios. Por último, hay que prestar atención a los materiales que componen el objeto y el estado en el que estos materiales se encuentran.
La naturaleza frágil de algunas prendas, como la indumentaria o cualquier otro tipo de objeto textil, requiere, además, la aplicación de una serie de procedimientos que ayuden a reducir considerablemente los posibles daños. Esta tarea, ya de por sí minuciosa y compleja, se vuelve más complicada cuando debemos afrontar problemas como la falta de presupuesto, de espacio o de personal.
En esta jornada de formación prestaremos especial atención a las necesidades de los museos locales, gran parte de los cuales carecen de personal especializado y de los presupuestos necesarios. Contaremos con la participación de tres reconocidas y experimentadas especialistas que nos proporcionarán soluciones prácticas y asequibles, siempre dentro de los estándares de conservación adecuados.
Mas información en el programa que puede descargar en la columna de la derecha.
