L’ETNO propone una reflexión en torno al viaje que ha transformado la imagen de “lo rural” y las maneras de hacer y ver de las personas que han habitado y habitan las comunidades rurales valencianas.
Cuando un muro de piedra sufre un derrumbe, las piedras caen y se esparcen (provocando una SOLSIDA). El muro no desaparece, pero deja de sujetar la tierra. Como si fuesen un muro, las comunidades que conforman muchos de los pueblos del mundo rural valenciano han sufrido derrumbes a partir de la segunda mitad del siglo XX, a causa de los cambios inducidos por la industrialización, la concentración de servicios y las oportunidades laborales y formativas en las ciudades. Hoy, estas comunidades comienzan a recibir población. Esto pasa porque la mirada que las sociedades urbanas proyectan sobre lo rural ha cambiado, bajo los nuevos paradigmas de sostenibilidad, naturaleza y ocio. Pero los nuevos pobladores traen unas maneras de vivir y de entender el mundo que son más urbanas que rurales. El derrumbe (la SOLSIDA) se rehace, el muro se alza de nuevo, pero la comunidad que se conforma ya no es la misma.
Con SOLSIDA, L’ETNO propone una reflexión en torno al viaje que ha transformado la imagen de “lo rural” y las maneras de hacer y ver de las personas que han habitado y habitan las comunidades rurales valencianas.