Antes de que Marc le atrapara en sus dibujos, el Hombre del Saco vivía en la cabeza de Almudena (es un decir). Era un cuento que Almudena contaba en las escuelas y bibliotecas de muchos pueblos. Hasta que un día lo escribió para la colección “Espanta la por” de L’ETNO. Pero, como buen espanta criaturas, el Hombre del Saco debe seguir pasando de boca en boca. Y aquí es donde entráis vosotros.